Cl.
Querco-Fagetea
Br.-Bl. & Vlieger in
Vlieger 1937
(también
en PDF
)
[Quercetea
robori-sessiliflorae Br.-Bl. & Tüxen 1943,
Quercetea pubescentis Doing 1955,
Quercetea robori-petraeae Br.-Bl. & Tüxen ex
Oberdorfer 1957,
Quercetea pubescenti-petraeae Jakucs 1960,
Fraxino-Fagetea Moor 1975]
Or. Quercetalia pubescentis
Klika 1933
[Quercetalia
pubescentis Br.-Bl. 1931,
Orno-Ostryetalia Jakucs 1959]
Al. Quercion pubescenti-petraeae
Br.-Bl. 1932
[Quercion
pubescentis Br.-Bl. 1931,
Buxo-Quercion pubescentis Zólyomi & Jakucs 1957,
Quercion pubescenti-sessiliflorae
Br.-Bl. 1932]
Subal. Buxo
sempervirentis-Quercenion pubescentis
Zólyomi & Jakucs ex Jakucs 1960
Lonicero xylostei-Pinetum
salzmannii
Gamisans & Gruber 1988 (Tabla XIV)
Ecología.
El pinar de pino negral o «nasarro» (Pinus
nigra
subsp.
salzmannii),
es una formación de tipo submediterráneo que aparece en el Prepirineo más
continental, compartiendo espacio con el quejigal seco allí donde al pino royo (Pinus
sylvestris)
le cuesta medrar, colonizando terrenos margosos
y pedregosos. Estos bosques
han sido estudiados en profundidad por
Gamisans & Gruber (1988, 1991).
Composición florística.
El «nasarro» es una especie endémica de la mitad oriental peninsular que apenas
llega al sur de Francia. Suele aparecer junto con otros árboles como el quejigo
(Quercus subpyrenaica), la carrasca (Q. ilex subsp.
rotundifolia), el pino carrasco (Pinus halepensis, al
sur de nuestra zona) e incluso pino royo (Pinus sylvestris). Como
características del sotobosque tenemos una serie de plantas del quejigal como
Lonicera xylosteum, Cytisophyllum sessilifolium, Acer opalus,
Amelanchier ovalis y Sorbus torminalis, además del
omnipresente boj (Buxus sempervirens). No faltan tampoco plantas
más termófilas del carrascal-encinar como la propia carrasca, Asplenium
onopteris, Rubia peregrina, Phillyrea latifolia o Arbutus unedo.
Espectros biológico y corológico.
P: 50,0 / 50,0 / 81,6.
H: 36,7 / 36,7 / 15,4. Ch: 6,7
/ 6,7 / 1,5. Musci: 6,7 / 6,7 / 1,5. || Eur.: 40,0 / 40,0 / 16,1. Submed.: 26,7
/ 26,7 / 66,7. Med.:
20,0 / 20,0 / 14,2. Plurirreg.: 10,0 / 10,0 / 2,2. Late-Pir.: 3,3 / 3,3 / 0,7.
Distribución.
Los pinares de nasarro ocupan buena parte del Sobrarbe y tienen su límite de
distribución septentrional en la periferia del Parque en Añisclo, donde tomamos
un inventario de un barranco que desemboca en el Bellós. De hecho, la solana
nororiental de Añisclo estuvo cubierta por este tipo de bosque hasta que se
incendió a finales de los ochenta.
Protección legal.
Hábitat de importancia comunitaria
prioritario para su conservación
en Europa, incluido bajo el epígrafe «9530*. Pinares (sub-)mediterráneos de
pinos negros endémicos».
Sintaxonomía. A la
vista de los inventarios publicados por
Gamisans & Gruber (op.
cit.) y del nuestro, parece evidente el vínculo de esta asociación con la
clase Querco-Fagetea y no con Junipero-Pinetea como hacen
Rivas-Martínez & al.
(2001: 166).
Tabla XIV. Lonicero xylostei-Pinetum
salzmannii Gamisans & Gruber 1988 |
Características de asociación |
|
|
Viola riviniana |
1.1 |
Pinus nigra
subsp. salzmannii |
4.2 |
|
Rhytidiadelphus
triquetrus |
+.3 |
Lonicera xylosteum |
+ |
|
Hylocomium splendens |
+.3 |
|
|
|
Hedera helix subsp.
helix |
+ |
Características de
Quercetalia pubescentis |
|
|
Helleborus foetidus |
+ |
Buxus sempervirens |
5.3 |
|
|
|
Quercus subpyrenaica |
2.2 |
|
Características de Quercetea
ilicis |
|
Quercus
subpyrenaica (arbust.) |
1.1 |
|
Phillyrea latifolia |
2.2 |
Acer opalus |
+ |
|
Quercus ilex
subsp. ballota |
1.1 |
Acer opalus
(arbust.) |
+ |
|
Quercus ilex
subsp. ballota (arbust.) |
1.1 |
Amelanchier ovalis |
+ |
|
Arbutus unedo |
+ |
Cytisophyllum
sessilifolium |
+ |
|
Rubia peregrina |
+ |
Sorbus torminalis |
+ |
|
Asplenium onopteris |
+.2 |
Rosa sempervirens |
+ |
|
|
|
Primula veris
subsp. canescens |
+ |
|
Acompañantes |
|
|
|
|
Polygala calcarea |
+ |
Características de Querco-Fagetea |
|
|
Hieracium murorum |
+ |
Hepatica nobilis |
2.1 |
|
Aquilegia vulgaris |
+ |
Carex digitata |
1.2 |
|
Melissa officinalis |
+ |
Pinus sylvestris |
+ |
|
Ramonda myconi |
+ |
Fragaria vesca |
+ |
|
Luzula sp. |
+ |
|
|
|
Helictotrichon sedenense |
+ |
Inventario PI0426: 800 m2;
50º N; cobertura arbóreo: 80% (15 m alto); arbustivo: 80% (4 m); herbáceo:
20% (30 cm). Fanlo [A], bco.
Mazcurta,
800 m,
BH6210, 7-V-1998, JLB, 070598C
Buxo sempervirentis-Quercetum
pubescentis
Br.-Bl. ex Bannes-Puygiron 1933 (Tabla
61)
[ass. à
Quercus pubescens et
Buxus sempervirens Br.-Bl. 1932]
Ecología.
Bosques de quejigos o «cajicos» (en nuestro ámbito
Quercus subpyrenaica, es decir Q. gr. cerrioides),
de tipo submediterráneo continental que colonizan el piso montano
prepirenaico sobre sustrato calizo, margas o flysch, resistiendo más el frío que
los carrascales. El quejigal prefiere suelo algo más profundo y ambiente menos
seco que el carrascal y establece la transición entre éste (vegetación
mediterránea de hoja dura) y los pinares o hayedos eurosiberianos. La
degradación del quejigal da lugar a matorrales de boj o erizón y a pastos del
Bromion y Aphyllanthion.
Composición florística.
Lo normal es ver el quejigo mezclado con pino albar, carrasca u otros árboles.
En el sotobosque encontramos al sempiterno boj, usado para hacer utensilios de
cocina, la senera (Amelanchier ovalis) con la que se hacen entre otras
cosas los palos que se utilizan en los dances tradicionales, los «palotiaus», la
«betalaina» (Viburnum lantana), el sangunillo (Cornus sanguinea),
algún arce (Acer campestre), Cytisophyllum sessilifolium,
Coronilla emerus, madreselvas como Lonicera etrusca y L.
xylosteum, la primavera (Primula veris), etc.
Distribución.
El quejigal es el bosque más común del piso montano calizo de Pirineo aragonés.
Ocupa amplias superficies de la montaña prepirenaica, preferentemente, donde el
hombre se ha establecido tradicionalmente, por lo que en muchos sitios se ha
usado como dehesa boyal o «boalar», para carboneo, leñas e incluso se ha
labrado. Sin embargo, en el Parque es bastante escaso con sólo 152 Ha, el 4,5%
de los bosques. Sólo hallamos buenas masas en el valle de Escuaín (donde se
encuentran el 95% de los quejigales del Parque), el más humanizado de los cuatro
valles del territorio protegido, más algún rodal en Añisclo y Ordesa. Intervalo
altitudinal: 900-1500 (1700) m.
Variabilidad.
En nuestro territorio hemos podido reconocer dos
subasociaciones:
quercetosum subpyrenaicae O. Bolòs &
P. Montserrat 1984, que sería la típica de los quejigales sobre todo en
solanas del Pirineo y Prepirineo aragonés, donde Quercus humilis (= Q.
pubescens) es sustituido por una serie de formas intermedias y al
parecer hibridógenas con Q. faginea que se han venido llamando
Q. gr. cerrioides, en nuestro caso se trata de Q.
subpyrenaica (= Q. humilis subsp. subpyrenaica). La
hemos visto sobre todo en Escuaín y alguna mancha en Añisclo.
Subasociación
pinetosum pyrenaicae
Rivas-Martínez & al. 1991 (tabla
61), que agruparía los pinares de pino
royo pirenaico centrales, ± musgosos, ricos en plantas del quejigal, sobre todo
en umbría pero también en solanas en situación de inversión térmica, en lugares
donde el frío limita la entrada del quejigo. La vemos a la entrada de Ordesa y
en Escuaín, en el piso montano. Comparado con los pinares de solanas calizas del
Primulo columnae-Pinetum teucrietosum catalaunici Carreras & Carrillo in
Carreras
& al. (1995: 33) descritos del Prepirineo catalán, se distingue por la
práctica ausencia tanto de estrato muscinal como de plantas de Vaccinio-Piceetea,
así como por su posición altitudinal más baja.
Espectros
biológico y corológico. H: 48,5 / 43,2 / 21,4.
P caduc.: 19,2 / 25,6 / 12,2. P peren.: 10,1 / 15,0 /
57,2. Ch: 7,1 / 4,8 / 2,1. Musci: 7,1 / 4,0 / 4,8. G:
6,1 / 6,2 / 2,0. Ep. parás.: 1,0 / 0,9 / 0,2. Th: 1,0 / 0,4 / 0,1 || Eur.: 38,4
/ 35,7 / 20,4. Lateeur.: 25,3 / 30,0 / 16,7. Submed.+latesubmed.: 12,1 / 15,4 /
25,3. Plurirreg.: 11,1 / 11,0 / 34,8. Latealp.+Bor.-Alp: 9,1 / 6,2 / 1,7.
Med.: 4,0 / 1,8 / 1,2.
Por último, aunque no los hemos inventariado, es muy
probable que los matorrales de boj ricos en plantas nemorales procedentes de la
degradación de los quejigales de los valles de Vió y Escuaín, se pudieran
incluir en la subasociación
buxetosum sempervirentis I.
Soriano 2001.
Subal. Amelanchiero-Buxenion
(O. Bolòs & Romo 1989) I. Soriano & Sebastià 1990
[Amelanchiero-Buxion O. Bolòs & Romo 1989]
Rhamno saxatilis-Buxetum sempervirentis
Tüxen 1952 (Tabla
62)
Ecología.
En nuestro territorio de estudio el boj (Buxus
sempervirens), es un arbusto omnipresente que vemos en todo
tipo de comunidades forestales y sus matorrales de degradación, desde el piso
basal al montano superior: carrascales, quejigales, pinares de pino royo,
hayedos, abetales y bosques mixtos. No obstante, la asociación que nos ocupa
proviene de la degradación del quejigales o pinares del
Buxo-Quercetum pubescentis.
En las laderas solanas más castigadas por el fuego o el
hacha, con suelos más degradados y pedregosos, los bujedos se constituyen en
comunidad permanente.
Composición florística.
El estrato arbustivo esta dominado o codominado por el boj y la senera (Amelanchier
ovalis), junto con otros nanofanerófitos termófilos como Rhamnus
saxatilis, Coronilla emerus, Genista scorpius subsp.
scorpius o Cytisophyllum sessilifolium. En el estrato herbáceo
tenemos como especies diferenciales a Teucrium chamaedrys, Rubia
peregrina, Polygonatum odoratum, acompañadas de un conjunto de
especies accidentales variable.
En el
inventario 3, más sombrío que los otros, aparecen el avellano (Corylus
avellana)
y el tilo (Tilia platyphyllos),
en lo que podría ser una evolución hacia el
Buxo-Quercetum pubescentis buxetosum.
Sintaxonomía.
La gran amplitud ecológica que muestra el boj dificulta su asignación
sintaxonómica, aunque se han realizado algunas aproximaciones como las de
Bolòs &
Romo (1989), que crearon una nueva
alianza para agruparlos, Amelanchiero-Buxion. Más tarde
Soriano &
Sebastià (1990), cambian su
estatus al de subalianza por considerar que las especies propuestas son poco
fieles y está ligadas a los bosques del orden Quercetalia pubescentis.
Distribución.
Esta asociación de origen alpídico se distribuye ampliamente por el
dominio pirenaico y prepirenaico del quejigal calizo. En nuestro ámbito, aunque
hemos levantado pocos inventarios, creemos que podemos asignar a este sintaxon
los bujedos de las solanas del piso montano de Torla, valle de Vió y Añisclo. No
obstante debería realizarse un muestreo detallado para precisar tanto su
distribución como su composición florística.
Espectros biológico y corológico. P:
34,8 / 34,2 / 68,4. H:
34,8 / 32,9 / 14,9. Ch: 17,4 / 18,4 / 8,2. G: 10,9 / 11,8 / 7,8. Th: 2,2 / 2,6 /
0,6. || Eur.+lateeur.: 28,3 / 23,7 / 12,8.
Submed.: 21,7 / 23,7 / 62,8. Med.+latemed.:
21,7 / 22,4 / 9,7. Plurirreg.: 15,2 / 18,4 / 10,7. Oromed.: 8,7 / 9,2 / 3,4. Alp.:
4,3 / 2,6 / 0,6.
Protección legal.
Hábitat de importancia comunitaria bajo el epígrafe «5110.
Formaciones estables xerotermófilas de
Buxus sempervirens
en pendientes rocosas».
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