Or. Arrhenatheretalia
Tüxen 1931
(también
en PDF
)
[Arrhenatheretalia
Br.-Bl. 1931,
Trifolio-Cynosuretalia
Sougnez & Limbourg 1963,
Poo alpinae-Trisetetalia
Ellmauer & Mucina in Mucina, Grabherr & Ellmauer 1993]
Al. Arrhenatherion
Koch 1926
Los prados de siega son sistemas seminaturales, es decir,
están intervenidos por el hombre y, en función de su manejo (número de cortes,
riego, abonado, pastoreo e incluso siembra), pueden dar lugar a diferentes
composiciones florísticas (Chocarro,
1992). En general, proceden de antiguos panares (campos de cereal de montaña,
normalmente centeno o trigo) o patatales reconvertidos en prados para la
producción de hierba con la que alimentar el ganado en invierno. En algunos
casos, después de una siembra inicial se deja a la naturaleza interactuar con el
manejo humano; en otros, los prados se resiembran periódicamente. En el momento
actual, la pradería pirenaica sufre una regresión al cambiar muchos ganaderos de
actividad, dedicarse al turismo o jubilarse; así, muchos se están abandonando o
su manejo es más extensivo y menos cuidado como vemos por la proliferación de
umbelíferas, incluso se urbanizan para construir segundas residencias.
Dentro del Parque sólo funcionan en la actualidad como tal
los prados de Andecastieto en Ordesa, junto al centro de visitantes del Parador.
Sin embargo, en los alrededores del espacio protegido podemos ver buenos
ejemplos de pradería todavía productiva en los valles de Broto y Pineta.
Existieron prados en los siguientes lugares del PNOMP:
Ordesa: Bordas de
Salarons, recientemente abandonados, evolucionan hacia pastos de Bromion;
Casa Oliván, transformados en pastos de Bromion; Soaso, transformados en
herbazales asimilables al Triseto-Heracleetum. Probablemente, buena parte
de los actuales pastos de Bromion de Laña Caballo y alrededores en un
momento u otro fueran usados como prados.
Añisclo: Bordas de Aso,
abandonados hace mucho tiempo y ahora convertidos en pastos secos de
Aphyllanthion-Bromion invadidos de aliagas (Genista scorpius), artos
o majuelos (Crataegus monogyna) y arañones (Prunus spinosa);
presumiblemente evolucionarán hacia el quejigal. Seguramente tanto en Fuen
Blanca como en la Ripareta algunos herbazales higrófilos del Triseto-Heracleetum
fueron manejados como prados. Mención aparte merecen los prados de Bestué, entre
Añisclo y Escuaín, situados en fajas estrechas y pendientes imposibles; su
integración ecológico-paisajística y cultural ha sido uno de los motivos para la
catalogación de Macizo de Monte Perdido como reserva de la Biosfera por la
UNESCO.
Escuaín: por todo el
valle quedan evidencias de abancalamientos y restos de prados, en su mayoría
convertidos en pastos de Bromion o colonizados por leñosas de orla de
bosque y por pinos. Dentro del Parque las zonas de la Valle, Bocera y Plana
Pinar pudieron albergar pradería.
Pineta: toda la solana
de Espierba –fuera del Parque– está plagada de antiguos prados y antes panares,
como lo refleja la toponimia en parajes con Panar de Diera, Panar de Costadieras,
La Pradería, Felqueral (que significa
helechal-prado), Panalbar, etc. Aunque los mejores prados se encuentran sin duda
en la zona baja del valle, en la cola del embalse de Javierre, en el paraje
denominado El Plan donde todavía se dallan. Antiguos prados de El Cornato están
siendo utilizados como zona de acampada. Dentro del Parque era objeto de
artigueo (quema y cultivo de parcelas forestales) la zona del fondo del valle en
lo que se denomina «L’Artica Gran».
Cabe señalar que en los pastos supraforestales de los
puertos de Góriz estaba permitido dallar durante un día, siempre antes de la
entrada del ganado en las estivas que se realizaba el primero de agosto (Balcells,
1985).
Rhinantho mediterranei-Trisetetum flavescentis Vigo 1984 (Tabla
5)
[Gentiano
luteae-Trisetetum flavescentis XE Vigo 1984]
Estructura y composición florística.
Prados de siega del piso montano que forman comunidades herbáceas densas y
relativamente altas (hasta un metro). Florísticamente suelen ser muy ricos en
especies sin que ninguna llegue a dominar más que localmente. Destacan gramíneas
como
Arrhenatherum elatius,
Dactylis glomerata,
Trisetum flavescens,
Phleum pratense
subsp.
bertolonii,
Holcus lanatus,
alguna vez
Festuca pratensis,
etc. En primavera, antes del desarrollo de las gramíneas citadas suelen
sobresalir los capítulos amarillos de
Taraxacum officinale,
o los blancos de la milenrama (Achillea
millefolium),
el aspecto papiráceo-amarillento del
Rhinanthus pumilus,
junto con otras plantas encespedantes como los tréboles (Trifolium
repens,
T.
pratense),
Lotus corniculatus
subsp.
corniculatus,
Vicia cracca,
Plantago lanceolata
o
Ranunculus acris
subsp.
despectus.
Su máximo desarrollo se alcanza en la segunda mitad de junio, momento en el que
se da el primer corte (y único actualmente en Andecastieto), y si el verano trae
tormentas puede darse un segundo corte a finales de agosto (Pineta).
Espectros biológico y corológico.
H: 76,6 / 78,5 / 90,2. Th: 14,1 /
10,4 / 7,0. Ch: 6,3 / 7,4 / 2,2. G: 3,1 / 3,7 / 0,6. || Eur.: 53,1 / 48,5 /
43,5. Plurirreg.: 37,5 / 41,7 / 51,5. Submed.+Med.:
9,4 / 9,8 / 5,0.
Distribución. Como ya
hemos dicho, dentro del Parque, en la actualidad sólo se aprovechan los prados
de Andecastieto, a la entrada de Ordesa, mientras que en las bordas de Salarons
fueron abandonados hace algunos años. Sin embargo, en las cercanías hay buenas y
productivas praderías por todo el valle de Broto, Bestué y Pineta.
Esta
asociación aparece por toda la cara sur pirenaica, desde el valle de Ribes en el
Pirineo oriental (Vigo,
1996: 118),
hasta el valle de Broto y probablemente el de Tena en el central.
Variabilidad.
Tenemos tres inventarios procedentes de las bordas de Salarons (Ordesa) de unos
prados abandonados recientemente. Contienen un buen número de plantas de
Festuco-Brometea
y Brometalia
como Bromus
erectus
subsp.
erectus,
Ranunculus bulbosus,
Plantago media,
Centaurea scabiosa,
Trifolium montanum
subsp.
montanum
o
Euphrasia pectinata,
lo cual nos indica su
evolución hacia un pasto de
Bromion.
Protección legal.
Hábitat de importancia comunitaria bajo el epígrafe «6520.
Prados de siega de montaña».
Al. Triseto-Polygonion bistortae Br.-Bl.
& Tüxen ex Marschall 1947
[Polygono-Trisetion
flavescentis Br.-Bl. 1946]
Triseto flavescentis-Heracleetum pyrenaici
Br.-Bl. ex O. Bolòs 1957 (Tabla
6)
[Astrantio-Avenuletum
pubescentis Vigo 1984,
Campanulo patulae-Violetum cornutae Nègre 1972]
Estructura y composición florística.
Asociación de los herbazales altos y prados de siega higrófilos del piso montano
alto e incluso subalpino, que al contrario de los prados del
Rhinantho-Trisetetum
es rica en hierbas altas y de hoja grande (megaforbias). Nuestros inventarios
son atípicos y no tienen algunas de las plantas más habituales como
Polygonum bistorta,
Trisetum flavescens
o Crepis
pyrenaica.
Entre las especies características y diferenciales de alianza tenemos
Heracleum
sphondylium
subsp.
pyrenaicum,
Geranium sylvaticum
subsp.
sylvaticum,
Astrantia major
subsp.
major,
Phyteuma spicatum
o Pimpinella
major.
El antiguo abandono se refleja por la entrada de megaforbios (invs. 1-3) como
Aconitum vulparia
subsp.
neapolitanum,
Scrophularia alpestris,
Leuzea centauroides
o
Lathyrus occidentalis
en zonas con bastante inclinación (30-40º), así como de plantas de los pastos de
Mesobromion.
En muchos casos por su frescor han servido de sesteadero del ganado, por lo que
la fertilidad añadida favorece a plantas nitrófilas como
Urtica dioica
subsp.
dioica
o
Rubus idaeus.
Por otra parte, cabe decir que Heracleum sphondylium
subsp. pyrenaicum es una planta megafórbica de margen de bosque que
invade los prados de siega mal gestionados o poco intervenidos, que gusta de
suelos profundos y frescos. Es hierba malquerida por el ganadero ya que el
cañote que saca es muy gordo, cuesta más de cortar y crea problemas de
compactación en las pacas de hierba. Por ello se intenta eliminar de los prados
por todos los medios, como echando sal en el interior de la caña, práctica
habitual en San Juan de Plan en el valle de Chistau (F. Fillat, com.
pers.). Invade lugares que fueron antiguamente cultivados para cereal y
después transformados en prados, junto con especies de megaforbios, márgenes de
bosque y las que proceden de esos antiguos prados.
Espectros
biológico y corológico. H: 81,3 / 82,0 / 80,6.
G: 5,3 / 6,0 / 2,0. P: 5,3 / 5,3 / 15,3. Th: 4,0 / 3,3
/ 1,2. Ch: 4,0 / 3,3 / 1,0. || Eur.: 58,7 / 56,7 / 53,1. Bor.-alp.: 17,3 / 20,0
/ 23,5. Plurirreg.: 17,3 / 18,7 / 22,4. Submed.: 6,7
/ 4,7 / 1,0.
Distribución.
Esta comunidad ya no se dalla en el ámbito del Parque, y ya
no funciona como prado, aunque nos quedan muestras de su antigua presencia a
través de herbazales higrófilos secundarios, en algunos casos bordeando bosques
de Fagetalia. Así lo vemos en Ordesa bajo las Gradas de Soaso, en la Fuen
Blanca de Añisclo y en la zona de la cueva Tormosa de Pineta.
Sintaxonomía.
Esta asociación fue mencionada por Rivas Goday de Ordesa,
bajo las gradas de Soaso, en el resumen de un trabajo que tradujo sobre los
prados de
Trisetum flavescens
en Suiza
(Marschall,
1947b: 679; 1947a).
Este último autor nomina la asociación atribuyéndola a Braun-Blanquet, aunque el
primero que publicó un inventario de la misma fue
Bolòs (1957: 507),
en un trabajo sobre la vegetación del valle de Arán, por lo que debe
considerarse como el tipo de la asociación.
Protección legal.
Hábitat de importancia comunitaria bajo el epígrafe «6520.
Prados de siega de montaña».
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